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Lamentablemente, en cuestión de días, Windows 10 dirá adiós, es decir, millones de usuarios ya no recibirán actualizaciones de seguridad gratuitas, quedando así vulnerable frente al entorno cibernético.
Por ende, si aún utilizas este SO, debes prestar atención, ya que en este breve artículo te explicamos las cuatro cosas más importantes que necesitas saber sobre esta inminente despedida.
Ningún sistema operativo, menos Windows 10 es eterno
El gigante tecnológico americano siempre ha retirado el soporte a sus versiones anteriores, dejando a millones de usuarios en una encrucijada, como sucedió con Windows XP o Windows 7.
No obstante ello, la situación actual con Windows 10 es particular, ya que millones de usuarios no pueden actualizar a Windows 11 debido a los requisitos de hardware, como una CPU moderna o el indispensable TPM 2.0.
Por tanto, si eres uno de esos usuarios de Windows 10 que pronto se quedará sin soporte, aquí te desglosamos lo esencial para que el 14 de octubre no te tome por sorpresa.
¿El histórico sistema operativo dejará de funcionar?
Lo primero que debes saber es que, el fin de soporte significa que Microsoft dejará de ofrecer actualizaciones de seguridad, correcciones de errores y asistencia técnica oficial de forma gratuita.
Eso indica que tu sistema seguirá funcionando con normalidad, pero no recibirás más parches y quedarás expuesto a posibles vulnerabilidades futuras.
¿Afecta a todas las versiones?
La realidad es que sí. De hecho, la mayoría de las versiones de uso doméstico y profesional de Windows 10, incluidas las ediciones Home y Pro, dejarán de recibir soporte.
Incluso las ediciones “Enterprise” o “Education” se verán afectadas. Las únicas excepciones son “Windows 10 IoT Enterprise Long-Term Servicing Channel” (LTSC) y “Windows 10 IoT Enterprise”, ediciones muy específicas no aptas para el uso cotidiano.
¿Se pueden instalar actualizaciones de alguna manera?
Microsoft ofrece un programa de soporte extendido (ESU), que permite a usuarios y empresas recibir parches de seguridad (solo de seguridad) a cambio de una tarifa que se duplica anualmente.
Por lo tanto, si no te importa pagar, puedes extender la vida útil de tu Windows 10 por hasta tres años más. Además de ello, existe una herramienta no oficial llamada 0patch, que permite aplicar microparches de seguridad.
Sin embargo, estos parches no son oficiales y se aplican en la RAM al iniciar el PC, lo que tiene sus pros y contras.
¿Y si mi PC no cumple con los requisitos de Windows 11?
Desde Redmond aconsejan actualizar a Windows 11, pero si el hardware de tu PC no es compatible, la situación se complica, aunque no es imposible.
Es más, puedes instalar Windows 11 en un PC no compatible y, sorprendentemente, funcionará perfectamente.
Para ello, te recomendamos realizar una copia de seguridad de tus archivos importantes. Luego, descargue la ISO de Windows 11 y utilice Rufus para crear un USB de instalación.
La propia herramienta Rufus te permite configurar opciones para saltarte los requisitos de RAM y TPM, permitiéndote instalar Windows 11 desde cero en tu «PC incompatible» sin problemas.
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(S.M.C)